Los restos de sangre hallados por la Guardia Civil en la embarcación del padre de Anna y Olivia, desaparecidas desde el pasado martes, pertenecen a su progenitor, Tomás Antonio G.C., igualmente en paradero desconocido, han informado a Efe fuentes cercanas al caso.
El hombre zarpó por última vez desde la Marina de Tenerife, en el puerto de Santa Cruz, en la medianoche del martes al miércoles, y entonces fue visto solo, sin la compañía de las niñas, cargando varias maletas y bolsos en su embarcación, una lancha de unos seis metros de eslora.