El Tribunal Supremo ha rechazado autorizar el toque de queda que la autoridades canarias querían implantar en la isla de Tenerife y ha avalado la decisión que tomó el Tribunal Superior de Justicia canario, que no vio proporcional la restricción de la libertad de circulación.
En una sentencia hecha pública este martes, la sala de lo contencioso-administrativo del alto tribunal desestima el recurso interpuesto por el Gobierno de Canarias contra el auto que dictó el TSJ canario, al considerar que éste estimó “de forma razonada” que carecía de justificación la limitación de la libertad de circulación a la vista de las circunstancias concurrentes en la isla de Tenerife.