La Consejería de Igualdad, Diversidad y Transparencia del Cabildo de Gran Canaria, que dirige Sara Ramírez, anima a las mujeres de Gran Canaria a participar en la encuesta que se ha activado, con el fin de elaborar el Mapa de ciberviolencias machistas en la Isla, en el que será el primer estudio de estas características que realiza en el Archipiélago.
En esta iniciativa, la consejera ha detallado que las mujeres interesadas solo tendrán que responder a un sencillo cuestionario confidencial, que encontrarán en el link www.opcionate.com/cuestionario-mujeres-internet, y en el que, con fines estadísticos, dar testimonio privado de su experiencia y de su percepción de esta realidad.
La encuesta, enmarcada en el proyecto ‘Ciberviolencias machistas: un análisis de la realidad actual en Gran Canaria’, pretende generar una ‘fotografía’ que permitirá mejorar la respuesta social e institucional frente a este creciente problema. Esta actuación cuenta con el apoyo de la Consejería de Igualdad de la Institución Insular, “y que persigue obtener un conocimiento más preciso del impacto de este problema en la Isla, así como identificar las necesidades y nuevas herramientas que son necesarias para ponerle freno, a partir de esa fotografía general”, ha explicado Ramírez.
“El objetivo fundamental es identificar las principales ciberviolencias machistas a las que se enfrentan las mujeres en Gran Canaria, conocer los impactos que tienen en sus vidas y los mecanismos de protección y denuncia con que cuentan”, comenta Lidia Fernández-Layor, especialista en igualdad de género y coordinadora de Opciónate, la organización que se encarga de la investigación.
Igualmente, señalan que las participantes contribuirán a que Internet sea un espacio de igualdad y respeto, donde las mujeres puedan sentirse libres y encontrar apoyos, además de proporcionar un mayor conocimiento sobre la experiencia de las mujeres de la Isla en el mundo digital. La privacidad de los datos está absolutamente garantizada y quienes así lo indiquen recibirán los resultados del estudio directamente, a través de su correo electrónico.
La consulta indagará en aspectos como la percepción del espacio virtual e Internet como entorno de violencia de género o la sensación de vulnerabilidad, así como en el conocimiento de respuestas y formas de actuar, cuando se observan conductas de violencia de género en línea; la impresión personal acerca del impacto de las ciberviolencias de género sobre distintos aspectos prácticos y emocionales de su vida; y las propuestas de prevención y actuación.
Ramírez ha incidido en que el cuestionario es una parte troncal de esta investigación, que también incluirá las aportaciones de organizaciones y personas clave en la estrategia frente a las ciberviolencias en Gran Canaria, junto a entrevistas en profundidad a mujeres que han vivido algún caso de ciberviolencia, para su posterior análisis. Asimismo, se incorporarán grupos focales, para fomentar el intercambio de información y valoraciones entre las participantes.
El resultado final será un documento operativo que recogerá los datos, experiencias y recomendaciones, para la mejora de la respuesta institucional de la ciberviolencia machista en Gran Canaria. Será, además, un instrumento para la concienciación y la sensibilización sobre esta amenaza poliédrica, que toma cuerpo de las más diversas formas, que van desde el ciberacoso, la pornografía no consentida o la ‘sextorsión’ hasta el uso de la tecnología, para monitorear y controlar los comportamientos de la pareja.
La filosofía y estructura de la investigación están en línea con lo establecido por el Convenio de Estambul del Consejo de Europa, que insta a visibilizar la ciberviolencia como una forma más de violencia contra las mujeres y a establecer actuaciones, escuchando las voces de quienes la han vivido en primera persona.
La generalización de Internet y las Nuevas Tecnologías de la Información, el uso de dispositivos móviles, redes sociales, servicios de mensajería instantánea y la geolocalización han facilitado nuevas dinámicas de control, intimidación, chantaje y acoso en línea, cuyo amplio alcance, rápida difusión y difícil eliminación no hace sino aumentar la gravedad y huella que dejan en las víctimas.