La consejera de Medio Ambiente del Cabildo, María Rodríguez, destaca “el buen hacer de la ciudadanía al dar con prontitud la voz de alarma.
El Servicio de Medio Ambiente del Cabildo de La Palma informa del rescate de una tortuga boba (Caretta caretta) que se encuentra recuperándose de una operación en una aleta en el Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Corporación insular, en espera de poder ser devuelta al mar. El ejemplar, de gran tamaño, fue recogido el martes, 10 de agosto, en la localidad costera de Puerto Espíndola, en el municipio de San Andrés y Sauces.
La tortuga, de 36 kilogramos de peso, fue avistada por los vecinos y vecinas con una gran cantidad de material de artes de pesca y rafia enredados en su aleta delantera derecha, los cuales le impedían nadar con normalidad, ocasionándole graves heridas.
Tras la orden de alarma, el personal de Medio Ambiente acudió a la zona y recogió el ejemplar, al que, lamentablemente, hubo que amputarle la aleta porque se encontraba completamente necrosada.
La consejera de Medio Ambiente del Cabildo, María Rodríguez, destaca “el buen hacer de la ciudadanía al dar con prontitud la voz de alarma, demostrando su compromiso por la conservación y la biodiversidad”. También destaca el trabajo y compromiso del personal veterinario, que hizo todo lo posible para sanar la tortuga.
María Rodríguez recalca “la importancia de evitar el vertido de basuras y artes de pesca en el océano ante los graves problemas de conservación que ello lleva aparejado al entorno marino”.
